Las balanzas fiscales y el PSOE

Ya se han publicado oficialmente las balanzas fiscales (PDF), que no son otra cosa que la diferencia de la suma de lo que paga cada persona y lo que el Estado redistribuye por toda España según las necesidades, pero solo teniendo en cuenta cada comunidad autónoma. Vamos, una de esas cosas que se han inventado los nacionalismos y que incomprensiblemente el Gobierno de Zapatero ha aceptado.

No se entiende que un Gobierno, autodefinido como rojo, de izquierdas, progresista y no-sé-cuántas-cosas-más, entre en el juego planteado por el nacionalismo, de derechas por definición. En realidad, lo que se plantea con las balanzas fiscales -exactamente igual que con el tema lingüístico, deportivo o representativo, por ejemplo- es una cuestión bien sencilla: los que abogan porque los informes económicos presentados recientemente por el ministerio de Economía y Hacienda sean vinculantes no consideran que Cataluña deba seguir siendo parte de España.

El punto de partida ya nace viciado de una gran falacia. Los impuestos gravan a las personas y no a las Comunidades Autónomas (CC.AA.), de modo que hacer un estudio sobre lo que el Estado invierte en las CC.AA. dependiendo de lo que pagan los ciudadanos allí empadronados es, como mínimo, no decir la verdad de la realidad. Pero si, una vez publicadas las mal llamadas balanzas fiscales, lo que se quiere es ajustarse lo más posible a la realidad, deberán tenerse en cuenta otros estudios por comunidades, como los de la población residente, la desertización o la vejez de la población.

Pactar con nacionalistas

¿Por qué no? ¿Quién es el beneficiario del kilómetro de AVE que transcurre por la provincia de Soria? Y, por último (a tener muy en cuenta porque este será el próximo debate planteado por los nacionalistas) ¿cuál es la solidaridad que cada comunidad autónoma quiere aportar al resto del Estado? ¿Es ser muy solidario tener un 8% del PIB como supuesto déficit? ¿Y el 6% ya no sería expolio? ¿Un 4%, basta? ¿O, en realidad, lo que se quiere es que la solidaridad desaparezca?

El problema, básico y que vamos arrastrando desde que el PSOE y el PP decidieron optar al Gobierno al precio que fuera, normalmente mediante pactos temporales con nacionalistas a cambio de prebendas definitivas, es que se entra en el juego que los nacionalistas marcan. Y, encima, alentados por un Gobierno de izquierdas.

No es de extrañar entonces que el PP se diera prisa en aceptar las balanzas fiscales, si bien no como único concepto a tener en cuenta, sí aceptando que se sitúen encima de la mesa de futuras negociaciones. Cataluña, la Comunidad de Madrid, Baleares y la Comunidad Valenciana -amén de Navarra y el País Vasco, un caso flagrante de lo que es el nacionalismo decimonónico en el siglo XXI, con la bendición de la Unión Europea-, son las CC.AA. más deficitarias con el juego aprobado por el PSOE.

Confrontar gestiones autonómicas

Todas están gobernadas ahora (o lo han estado durante largas temporadas) por la derecha, y no es casualidad que las más beneficiadas por este sistema sean las que el PSOE domina con mano fuerte desde décadas. ¿A qué juega el PSOE? ¿Quiere que los ciudadanos comparemos gestión económica en las diferentes CC.AA. y veamos el color del partido que ha gobernado en ellas?

Como muy bien ha demostrado Santiago M. Vicente con el dorso de un simple tetra brick de tomate frito -tomate recogido y producto fabricado en Extremadura pero la empresa está domiciliada en Cataluña-, las balanzas fiscales son una falacia. De hecho, es totalmente incomprensible que el PSOE haya caído en oficializar las balanzas fiscales defendidas por los nacionalistas –PSC incluido-, que no van a dejar de empujar para que sean vinculantes, cuando la izquierda se las da y presume de defender la redistribución de la riqueza y apretar a los que más ganan para que la (supuesta) redistribución sea más equitativa. Por no hablar de la sustitución de las clases sociales por la frontera y el terruño.

Desde luego, las balanzas fiscales se pueden defender, e incluso pedir que sean vinculantes únicas en negociaciones (como el de la nueva financiación autonómica), pero nunca alegando que es una política de izquierdas. Se podrá defender la oficialización de las balanzas fiscales desde la derecha y desde el nacionalismo, conceptos históricamente casi sinónimos, pero que venga Zapatero y se las dé de rojo haciendo público algo que lo único que puede ocasionar es que los ricos le pidan pagar menos -o recibir más- y que los pobres se queden con menos -o no reciban las ayudas pertinentes-, no tiene precio.

Tinta Digital

Los hombres ya parimos

Ernesto es uno de los protagonistas de Nocilla Experience, segunda parte de la trilogía de Agustín Fernández Mallo Proyecto Nocilla, y autor del proyecto Torre para Suicidas para la ciudad de Nueva York, urbe que no dispone de ‘unas instalaciones adecuadas y debidamente organizadas’ para los miles de suicidas (e intentos frustrados) que se consuman en la capital del mundo.

Como si fuera uno de los personajes de Fernández Mallo, creador del término Poesía Postpoética, ha aparecido en nuestras vidas Thomas Beatie, legal y oficialmente un hombre pero biológicamente una mujer, lo que le ha permitido tener un hijo pese a aparentar un hombre, a juzgar por las imágenes que nos han llegado de Oregón (Estados Unidos).

Ahora ya podemos decir, sin el menor error ni ruborizarnos un solo momento, que los hombres ya parimos. ¿O acaso hay alguien que se atreva a decir y mantener que Thomas no es un hombre? ¿No dice eso su cédula médica?

Papá-mamá

El caso del primer hombre embarazado y en ser mamá pone de manifiesto la potencia y verdadera fuerza del ser más racional que, de momento, se ha mostrado sobre la Tierra. Otra cosa es que esta racionalidad sea vista como progreso y avance. En breve podríamos estar hablando del primer ser humano hermafrodita. ¿Por qué no?

Lo que tiene poco sentido es sentirse hombre en el cuerpo de una mujer y querer ser mamá. O lo uno o lo otro, pero las dos cosas no puede ser (aunque Thomas se ha empeñado y ha logrado en demostrarnos que sí, que puede ser), desde el punto de vista racional.

Los avances científicos permiten que muchas personas, no contentas con el cuerpo y el sexo que les ha tocado, puedan solucionar y mejorar su vida. Pero entre esto y el caso de Thomas hay una línea que se debería marcar en el suelo, para no traspasarla nunca. Línea que debería hacer de ‘muro perfectamente blanco’, como el del proyecto de Ernesto, para evitar que ‘la visión del horizonte’ les haga cambiar de idea. ¿Qué pasa si mañana Thomas quiere volver a ser Tracy?

Soitu.es

Chávez, democracia, petróleo y 25 de julio

“La democracia es también un régimen que debe defenderse”, se escuchó de la conversación mientras hablaba Nicolas Sarkozy, tras el incendio criminal de un autobús de Marsella. Lo dejó escrito Yasmina Reza, en su libro-biografía del actual presidente de la República francesa durante su campaña electoral que le llevó al Elíseo.

Este viernes ha estado Hugo Chávez en España reuniéndose con el Rey y Zapatero. Según parece, han cambiado el “¿por qué no te callas?” por el “¿por qué no nos vamos a la playa?” y es de agradecer que incluso Rajoy vea con buenos ojos que las relaciones entre Venezuela y España vuelvan a su cauce, o se vayan calmando.

Pero no podemos dejar de volver a la frase recogida por Reza, la democracia debe defenderse. Probablemente la casualidad ha hecho que este 25 de julio se cumplan 9 años de la victoria aplastante de Chávez en las elecciones constituyentes venezolanas (120 de 128 escaños), un año después de su llegada a la Presidencia del país, y 7 años después de encabezar un golpe de Estado.

Gesto importante pero no suficiente

En 2000, Chávez volvió a ganar unas presidenciales -curiosamente, frente a un compañero golpista de aquél 1992- y unas legislativas, que le otorgaban al presidente funciones de la Cámara de representantes para legislar en materia económica y social, sobre todo.

Desde entonces, la oposición se organizó, aunque peor que mejor, con cierta preocupación. El punto culminante se produjo con la derrota de Chávez en el referendo para ‘perpetuarse de manera indefinida en la presidencia, sin término, suprimiendo, de manera absoluta toda posibilidad de oposición’, según ha dejado escrito el filósofo y director general de El Comercio de Perú, Francisco Miró Quesada Cantuarias.

Ahora, Chávez ha estado en España para que el agua que baja pase por el cauce natural del río. Es un gesto importante. Además, ha asegurado a Zapatero que “España tendrá petróleo de por vida”, una buena prebenda aunque no debería taparnos los ojos. Lo importante es que Chávez acepte que, tarde o temprano, tendrá que abandonar la Presidencia de Venezuela. En la alternancia, la no perpetuidad y la aceptación de las leyes consiste la democracia, esa que debe defenderse.

Soitu.es

El “buen ambiente” de la crisis

Estos hombres nuestros (y me permitirán que no diga: y mujeres, porque me refiero a los líderes de los dos grandes partidos españoles) andan estas últimas semanas -desde el pasado 9-M- que ni se lo creen. Bien es cierto que por motivos ciertamente diferentes y distantes. El uno, que anda buscando su centro, se supera cada día con declaraciones tan pomposas como las realizadas tras el pasado congreso del PP de Cataluña. El otro, que es el primero, busca la mayoría, la suya, la que le falta. Será en 2012 cuando se ponga a prueba. ¿Por qué no va a repetir candidatura? Veamos.

Mariano Rajoy, el uno, se ha convertido en el claro ejemplo del político español por excelencia. Hay ejemplos, muchos, y últimamente casi todos en el PP. Por ejemplo, un tal Arenas en Andalucía, ¿méritos? perder elecciones contra el último dinosaurio del PSOE. Si Andalucía está como está y Arenas no es capaz de desbancar de la Presidencia de la Junta a Chaves ¿qué se hace con él? Se le premia, una vicesecretaría. Otro ejemplo: una tal De Cospedal en Castilla-La Mancha. ¿Méritos? Perder con el delfín de Bono –el del 100% de los votos– en la comunidad manchega. ¿Premio? Secretaria general.

Y podríamos seguir así llenando unas cuantas líneas digitales. Auténticos políticos profesionales que no se les conoce más trabajo que el asiento en los ayuntamientos, parlamentos autonómicos o el nacional. Eso sí, en el PP suelen tener título universitario. Que, tal y como están las cosas, todos sabemos que no significa nada.

Así las cosas, se entiende que tras el pasado congreso del PP de Cataluña, una vez en Madrid Rajoy dijera, sin ruborizarse, que había visto “muy buen ambiente” durante las sesiones congresuales. Total, si solo abuchearon a Ana Mato -otra del club-, vicesecretaria general de Organización y Electoral, cuando intentó hablar de un partido unido, cohesionado y en el que todos se llevan muy bien.

Total, si la dirección del partido estuvo a punto de hacer el ridículo más espantoso -al estilo primarias del PSOE ¿se acuerdan de Almunia?- con la consagración de Montserrat Nebrera como la cara visible del sector crítico, y casi se convierte en presidenta por aclamación cuando la sacaron a hombros, pese a perder, del hotel barcelonés donde se celebró el cónclave popular. Solo faltó que la hubieran llevado hasta la puerta de la Monumental. Ahora que los nacionalistas quieren desterrar los toros de Barcelona. ¿Ha dicho usted, don Mariano, “buen ambiente”?

La palabreja estilo PSOE

El otro, que es el primero, y que busca la mayoría absoluta que no tiene en el Congreso y que sí disfruta en el resto de ámbitos políticos, no anda muy lejos del uno, que deben estar en otro planeta, claro. José Luis Rodríguez Zapatero ha salido torero, al estilo Nebrera sin escenificación -al menos que haya quedado registrada-, de una reciente entrevista para Antena 3. Territorio comanche, le debieron decir los asesores. Es el momento. La palabra tiene que salir de tu boca. Hazte rogar un poco pero dilo, que vean que no tienes miedo y que eres capaz de hacerlo en campo contrario. Total, si a Pepiño casi se le escapa en una de esas mañanas en las que se levanta sin saber si está aquí o allí.

Y Zapatero lo dijo. Los periodistas respiraron y al día siguiente ya tenían titular. ¿Periodistas, he dicho? Pero si el presidente estuvo a punto de salir con olés y con las dos orejas y el rabo. Da igual, pero lo ha dicho. Y sí, lo dijo, ahora ya podemos estar más tranquilos. No llegaremos a final de mes, la hipoteca no la vamos a poder pagar, los alimentos básicos suben como los grados en este sofocante verano que se avecina, pero no importa, Zapatero ha dicho, por fin, la palabreja y ya podemos estar tranquilos

Lejos de la realidad

El uno y el otro siguen ensimismados, con los datos del 9-M, sin tocar con los pies en el suelo. La crisis económica, que no será tan breve como desearíamos –Montilla dixit-, es negada por el presidente, pese a que la palabra ya está en el diccionario Zapatero-mundo real, y el líder de la oposición no ha dicho aún en sesión parlamentaria -y no sabemos si lo dirá-, ni en foro alguno, ni una sola medida que él tomaría si fuera el máximo responsable del Gobierno.

Así las cosas, menos mal que estamos en la Unión Europea, con una moneda única, y que la economía cada vez es más global, porque si dependiésemos de los dirigentes de los dos grandes partidos políticos -que consideran “buen ambiente” los abucheos y no son capaces de ver y tomar medidas en momentos de vacas flacas- no sé qué sería de nosotros.

Tinta Digital