Cosas que se aprenden viendo TV3

  • El catalán es una lengua que está en inminente peligro de desaparición.
  • En Cataluña nunca hay corrupción.
  • En Cataluña no hay aficionados al Real Madrid; de hecho, Cataluña solo tiene un equipo de fútbol: el Barça.
  • Hamás es una organización pacifista, desarmada y laica.
  • Los conservadores (PP, 14 escaños en el Parlamento regional) y los ecosocialistas (ICV, con 12 escaños) tienen una cobertura mediática y tratamiento abismalmente distintos. Ni les cuento Ciudadanos (3 escaños).
  • Nadie pone en duda la eficacia del sistema educativo, ni que la hecatombe del cambio climático llegará en cuestión de horas.
  • Nadie pone en duda que Obama es la gran esperanza del mundo.
  • Los seguidores de Fernando Alonso que llenan las gradas del circuito de Montmeló son todos asturianos.
  • Terra Lliure fue una organización armada, que no terrorista.
  • El presidente regional se llama José, pero el presidente de Aragón, también regional, se llama Marcel·lí.

[Adaptación libre de la relación de Carlos López, vía Queridos Camaradas]

Una sentencia del Supremo que no se cumplirá

Hace un par de semanas sacaba a colación en Tinta Digital la sentencia del Tribunal Supremo (TS) acerca de la asignatura de Educación para la Ciudadanía. Una de las dudas que ha dejado abierta esta decisión jurídica es su aplicación en un sistema de garantías que entremezcla los poderes político y judicial. Así, ahora, otra sentencia del TS tiene toda la pinta de que no se hará efectiva nunca.

El pasado 12 de diciembre de 2008, el TS desestimó (STS 6803/2008 ) el recurso de casación presentado por el Departamento de Educación de la Generalidad de Cataluña contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña del 14 de septiembre de 2004 que, por cierto, hacía referencia a un recurso contencioso-administrativo interpuesto contra una Resolución del Departamento de Educación autonómico de 29 de mayo de 2000; es decir, una justicia de velocidad de vértigo, como pueden comprobar.

Elección entre las lenguas oficiales

La decisión del Supremo, firme y sin recurso posible, ha puesto de manifiesto que, con la legalidad actual vigente, los padres tienen el derecho a elegir la lengua oficial de escolarización de sus hijos en la primera etapa de enseñanza.

El derecho a escoger entre las dos lenguas oficiales de Cataluña, castellano o español y catalán, y hasta que los niños cumplan los 8 años, la primera etapa, parece además una medida razonable. Para que la Consejería de Educación pueda organizar los siguientes cursos escolares, en función de las opciones de los padres, la Justicia ha recordado al departamento que en la hoja de preinscripción se debe preguntar por la lengua habitual de los alumnos.

Incumplimiento de las leyes autonómicas

Desde 2000, como ahora sabemos con sentencia judicial, desde antes todos los que conocemos la escuela en Cataluña, la Generalidad lleva incumpliendo las normas legales en relación a esta materia aprobadas por el Parlamento de Cataluña, sobre todo el artículo 21.2 de la Ley de Política Lingüística (1998) que reza: ‘los niños tienen derecho a recibir la primera enseñanza en su lengua habitual, ya sea esta el catalán o el castellano. La Administración ha de garantizar este derecho y poner los medios para hacerlo efectivo. Los padres o tutores lo pueden ejercer en nombre de sus hijos instando a que se aplique’.

La sentencia del TS obliga a la Administración autonómica a poner en marcha la famosa casilla, para que sepa qué idioma es el más idóneo para el estudio de los niños, en las hojas que en pocas semanas estarán disponibles en los colegios. Obliga y recuerda que es una ley aprobada por el Parlamento autonómico de obligado cumplimiento, como el resto, por supuesto. ¿Qué puede hacer el Supremo si la Generalidad se niega a cumplir la sentencia, como ya ha advertido?

Tinta Digital

“Hay muy poca gente que de verdad sepa algo real”

El mundo según Josep Pla [vía Nihil Obstat]:

Yo no sé nada de nada. Me gustaría saber cómo se las ingenian estos profesores que no tienen nada qué decir y que no paran de hablar, y que encima viven de lo que hablan. Es un curioso misterio todo esto. ¿No le parece a usted? Es como los médicos que solamente utilizan la penicilina. No va muy bien el mundo. Con esta leyenda de que todos somos iguales se cree que el mundo marchará, y la verdad es que hay muy poca gente que de verdad sepa algo real. Llegará un momento en que la gente sabrá manipular un complicado mecanismo, pero no sabrá encender un fuego.

Extracto de la que Pla consideró mejor entrevista que le habían hecho nunca [PDF uno, dos y tres]. La firmó Salvador Pániker para su libro Conversaciones en Cataluña y apareció en el suplemento Revista de La Vanguardia del 8 de mayo de 1997.

‘Solo los indolentes callan’

Ha sorprendido, este domingo, el artículo del presidente y editor de La Voz de Galicia: ‘Yo protesto’. Santiago Rey Fernández-Latorre le canta las cuarenta al Gobierno de Zapatero (crisis económica), a la oposición del PP (espionaje), al Gobierno autonómico del PSOE y BNG (imposiciones lingüísticas) y al poder económico. Que nadie espere nada similar, vamos, ni intuitivo, en el ámbito de Cataluña. ¿Alguien se imagina al señor Godó o al señor Asensio firmando un texto como este?

[…] Si digo todo esto, si protesto incluso por tener que protestar, no es porque me embarguen sentimientos derrotistas. Justo al contrario. Solo los indolentes callan. Los batalladores saben que el primer paso para afrontar con arrojo la solución de los problemas es dándoles la cara; poniéndose frente a ellos; citándolos.

La EpC que debería ser

El Tribunal Supremo (TS) ha resuelto que en los casos presentados ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo “no existe el derecho a la objeción de conciencia” en la asignatura de Educación para la Ciudadanía (EpC). De momento, el Supremo se ha pronunciado por un caso impugnado por la Junta de Andalucía que permitía, según el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, la objeción de conciencia. Tres casos más, también en manos del Supremo -provenientes de Asturias-, serán desestimados.

Según parece, y hasta que se haga público el contenido literal de la sentencia, los magistrados del Supremo han dictaminado que los padres “no tienen derecho a una educación a la carta para sus hijos”, entendiéndose “a la carta” como que no está en manos de los progenitores si sus vástagos pueden o no recibir asignaturas como, por ejemplo, Matemáticas, Filosofía o EpC, que han sido determinadas y forman parte de un currículo escolar que decide el Gobierno.

Asignatura obligatoria y polémica

Tampoco parece que los recursos ante el Tribunal Constitucional, anunciados por la parte demandada, puedan acabar como estiman éstos visto que el mismo Supremo ha sostenido que con EpC no se vulneran los derechos constitucionales recogidos en los artículos 16 y 27.3. Ejemplo de lo contrario es el artículo 30.2 que especifica la posibilidad de objeción de conciencia para los casos de la prestación militar obligatoria, ya resuelta y eliminada por la Administración Aznar.

Así las cosas, EpC se convertirá, salvo sorpresa, en una asignatura más, obligatoria en los últimos cursos de la ESO, y polémica como lo es, en algunos centros escolares de Estados Unidos, la historia de la biología evolutiva, donde religión y creencia se imponen a ciencia y evidencia.

Retahíla de recursos

Desde luego, lo que el Supremo ha dictaminado es que EpC puede ser una asignatura como el resto. Pero, también, que cabe recurso ante la posible utilización por parte del Gobierno -ora de un color ora de otro- de saltarse, vía libro de texto escolar, determinados derechos de los alumnos. Así, la Sala de lo Contencioso-Administrativo ha dejado diáfano que determinados contenidos (en los libros de la asignatura) pueden ser contrarios al artículo 27.3 de la Constitución. Y éste es el hueso del tema, de la ciudadanía y de la educación.

A lo que nos abocamos es a una retahíla de recursos contra el contenido de los libros de texto de las distintas editoriales. ¿Educación para la Ciudadanía? Sí, obligatoria. ¿El contenido del libro X? Recurso al canto. ¿El contenido del libro Z? Recurso al canto. Los valores constitucionales y el conocimiento de los textos básicos que regulan el funcionamiento de las distintas Comunidades Autónomas deberían ser un buen punto de partida para sentar en una misma mesa a PSOE y PP y dotar de contenido no doctrinario y partidista la asignatura de EpC.

Tinta Digital

Miralles o cómo ser comunista en Barcelona

Desde el balcón del consulado de Cuba en Barcelona se puede leer el cartel de la empresa Castro Construcciones, en el mismo Paseo de Gracia -la calle más cara de la ciudad Condal- que el local con jurisdicción cubana, y un poco más hacia la plaza de Cataluña divisar el edificio de la empresa Seguros Vitalicio. Amarga metáfora de la libertad.

Libertad, eso es lo que han reclamado este domingo en Barcelona (y Madrid) un grupo de exiliados cubanos arropados por ciudadanos de Cataluña a los pies del mandarino que está a pocos números del 34 de Paseo de Gracia, sede del consulado cubano. Sin embargo, no han estado solos.

España debe ser la única democracia que es capaz de crear individuos capaces de manifestarse en favor de una dictadura. Tomaremos la paradoja temporal como ejemplo. No puedo imaginarme una manifestación en favor del régimen franquista en el México o la Argentina de principios de los setenta del siglo XX. Menos, aún, una contramanifestación, en el mismo lugar, a la misma hora, sin el permiso correspondiente y con presencia institucional. Eso es lo que ha pasado hoy en Barcelona.

Jordi Miralles es secretario tercero de la Mesa del Parlamento autonómico de Cataluña y líder de EUiA. EUiA es la ridícula parte que queda de Izquierda Unida en Cataluña y acude en coalición electoral con ICV para sobrevivir. Miralles, que ha estado acompañado del senador Nuet y la también diputada autonómica Civit, ambos del mismo partido que Miralles, se ha presentado en la contramanifestación y ha participado en ella. Toda una lección de legalidad y solidaridad del señor Miralles, ya saben, el que considera que su Audi A6 es “transporte público”.

Soitu.es