“Pese a esta dimensión negativa que Fernando quiso enmendar cuando ya era demasiado tarde, no cabe duda de que el programa trazado en 1476 iba a tener muy ventajosas consecuencias. España tomaba para sí el modelo de Unión de Reinos que adoptara la Antigua Corona del Casal de Aragó y que limitaba los poderes correspondiente a la unitaria soberanía, respetando las formas administrativas de cada uno de los Reinos. Es un error creer que Castilla hizo a España; la hizo la Corona de Aragón, que estableció esa diferencia entre las tres dimensiones del poder, legislativa (Cortes), judicial (Audiencia) y ejecutiva (Consejos), que Montesquieu, siglos más tarde, consideraría como garantía de la libertad. Por primera vez en Europa una ley fundamental declaró ilegitima la servidumbre y los payeses de remensa adquirieron la plena libertad convirtiéndose además en propietarios de las tierras que trabajaban”.
Luis Suárez, en “Fernando el Católico” publicado en La Razón.