Miguel de Unamuno fue contradictorio, tanto en sus acciones como en sus escritos políticos. Su personalidad, compleja (aquí se le puede oír en su faceta literaria). Fue un avanzado de la polémica española, ahora convertida en ruido. Por este blog ya apareció una pincelada de su dicotomía política. Ahora se amplía, aprovechando una serie de cartas (algunas inéditas) que ven la luz en la Biblioteca Nacional. Unamuno, caótico. Sorprendentemente, olvidado por la izquierda actual. Atormentado, bregó.